La derrota del pasado lunes ante el Wolverhampton ha dejado muy afectado al Manchester United. El equipo sigue siendo muy criticado por aficionados y comentaristas, que cuestionan si el alemán Ralf Rangnick es el hombre adecuado para llevar este (enorme) barco a buen puerto esta temporada. Además, la llegada de Cristiano Ronaldo a Old Trafford ha provocado descontento en el vestuario, según los informes, con compañeros de equipo preocupados por su capacidad de influencia.
La prensa inglesa escribe esta mañana que el vestuerio está en llamas. El 'Mirror' cita a una fuente que asegura que hay hasta 11 jugadores que quieren marcharse, pues están decepcionados y se sienten marginados por el técnico alemán. El equipo parece completamente dividido.
'The Sun' explica que hay un sentimiento entre los diablos rojos de que hay algunos futbolistas favoritos y que siempre juegan, aunque no estén en forma. "Los jugadores están desmoralizados. Es una sensación de 'déjà vu' de años pasados. Los aficionados pueden pensar que los jugadores no están en condiciones de poner en práctica lo que el entrenador les pide que hagan, pero eso no es así. Algunos simplemente han perdido la motivación y las ganas. Luego hay una sensación en una parte del equipo de que hay algunos que siempre están llamados a jugar, no importa lo que hagan”, dijo al diario una fuente cercana a los diablos rojos.
Jesse Lingard, Donny van de Beek, Eric Bailly y Dean Henderson se encuentran, según 'Mirror', entre los jugadores más frustrados. Solskjaer fue criticado de tener favoritos y Rangnick ahora está experimentando el mismo problema.
TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO