Bruno Henrique fue la gran figura de Flamengo en las semifinales de la Copa Libertadores contra Barcelona: hizo los cuatro goles del Mengao (dos en la ida y dos en la vuelta) y con seis tantos se convirtió en uno de los máximos artilleros de la competencia, sólo por detrás de Gabigol (10), Hulk (7) y Fred (7).

Ahora bien, solamente un futbolista brasileño había logrado anotar esa cantidad de goles en una semifinal de Libertadores: Pelé en 1963. En aquella oportunidad, O Rey le hizo cuatro al Botafogo y luego Santos terminaría consagrándose campeón de esa edición tras vencer por 3-2 a Boca en la final.

Además, hubo otros dos jugadores no brasileños que lograron esa hazaña. Ellos fueron Albeiro Palomo Usuriaga con Atlético Nacional de Colombia ante Danubio, en la Libertadores 1989 y Miguel Borja, también con el Verdolaga, pero ante San Pablo y en 2016.