Si usted es peliculero, seguramente tendrá películas que quiere ver dos o tres veces; ya sea porque le gustó, porque alguien se la hace ver de nuevo o porque de casualidad alguien más la está viendo y usted está parado. ¿Qué pasa ahí? Pues se ven muchas escenas repetidas.
Déjeme decirle que estamos viendo escenas que se repiten. ¿Cuál es la película? Una selección que ilusiona; un equipo de fútbol que parece reponerse de situaciones difíciles del pasado. Y en el momento que todos asumimos que podemos dar más, nos cuestan los arranques de los partidos, empezamos a ceder puntos y nos marcan goles dolorosos como el de Uruguay al minuto 91.
Esta película normalmente no tiene finales felices. La parte I de esta ‘film’ fue así. Un arranque de ensueño, empezamos a ‘aflojar’ en un juego de local, no lucimos nada bien en la Copa América; empezamos a perder partidos importantes y finalmente no clasificamos a Rusia 2018.
HOY, vivimos una realidad parecida. Un bonito arranque (menos puntos, pero goleando a Uruguay y Colombia), pero perdimos con Perú, hicimos una pésima Copa América y sacamos 4 de 9 puntos en una triple fecha donde aspirábamos sacar 6 unidades al menos.
Ya analizaremos más adelante las falencias de La TRI, pero nos hace falta ser más contundentes, no confiarnos, dejar a un lado los experimentos en la alineación y saber aguantar los partidos. ¡ESTAMOS A TIEMPO! Que esta película tenga un final diferente. Quizás dirán que seguimos en zona de clasificación; pero saben algo, así fue la vez pasada. El gran problema es que si hoy no resolvemos, en un abrir y cerrar de ojos aparecemos en zonas incómodas donde todos dirán: «¡Qué pasó!».
Escrito por: Víctor Loor Bonilla
