No quebró a Messi porque la pierna de Leo estaba en el aire. Adrián Martínez le dio una patada al 10 que preocupó a todos, un planchazo que es roja directa y que manda a cualquier jugador a las duchas temprano.

Sin embargo, al principio el juez Leodán González le sacó la tarjeta amarilla, aunque luego fue al VAR y revalidó su decisión, ya que fue una patada innecesaria y sin precedentes.