Un susto que alarmó a todos los deportistas y seguidores de Tokio 2020. Se trata de Svetlana Gomboeva, la arquera rusa que se desvaneció durante la ronda clasificatoria individual femenina debido a un golpe de calor y que, luego de ser asistida por sus compañeros de equipo y el personal de salud, pudo recuperarse y en condiciones de continuar con la competencia.
La especialista en tiro con arco se desmayó tras revisar su puntuación final (puesto 45) por las altas temperaturas que había en el campo de Yumenoshima, que rondaban los 30 grados pero que la sensación térmica rozaba los 40 debido a un factor clave: la humedad (60%).
Una vez que recuperó el semblante, tuvo que ser sacada del estadio en camilla y despertó la preocupación no sólo de los presentes (que se refugiaron bajo la sombra) sino también de todos los atletas olímpicos, que tendrán que tener en cuenta dicha incidencia para que no les juegue en contra en sus competencias.
«Esperamos que se vaya recuperando. Básicamente no pudo soportar un día entero en el calor», dijo el entrenador Stanislav Popov, quien también indicó que la humedad fue determinante para la joven de 23 años colapsara. Además, el episodio ocurrió cerca de las 9 (hora japonesa), lo que llamó atención por no tratarse de una hora pico donde se recomienda descansar.
El calor de Tokio obligó a que, por ejemplo, las pruebas de maratón y marcha se trasladaran hacia Sapporo, una ciudad en el norte donde las condiciones son más favorables. Sin embargo, el incidente alarmó tanto a los organizadores como a los deportistas, que tendrán que ajustar los aspectos de hidratación, descanso, alimentación y sobre todo, de exposición al sol, para evitar alguna otra descompensación.
Por su parte, la rusa volverá a participar del certamen el próximo domingo 25 en la eliminatoria por equipos y luego, en otra prueba preliminar individual, el jueves 29. Cabe destacar que la surcoreana San An ha marcado recientemente un nuevo récord (680 puntos), superando los 673 que había anotado la ucraniana Lina Herasymenko en Atlanta 1996.
TOMADO DE DIARIO OLÉ
