Pep Guardiola ha concedido una entrevista a la ESPN, en la que ha desvelado la relación que tenía con el vestuario del Fútbol Club Barcelona, algo de lo que no se había pronunciado hasta el momento. Según el testimonio del entrenador, no con todos los futbolistas tuvo una relación idílica, debido a que alguno de ellos se preocupaba más por su bienestar antes que el del propio equipo.

«En el Barcelona tuve relaciones mucho más cercanas con unos jugadores que con otros porque hay muchos jugadores que piensan en el bien común, y me siento mucho más cerca de este tipo de jugador que de los que solo piensan ‘yo, yo, yo’. Estos, cuando tenemos que usarlos, los usamos, y cuando no los tenemos que usar, no los usamos», revela.

Además, Pep cuenta cómo ha vivido el vínculo directo con las diferentes plantillas con las que ha trabajado en su carrera como entrenador: «A lo largo de las temporadas, las relaciones con los jugadores siempre dejan cicatrices, pero también mucho aprendizaje. Se aprende de todo. Pero la relación entre el entrenador y los jugadores depende de ellos y no del entrenador. Hay jugadores que se merecen tener una relación cercana y otros una relación más distante».

El negocio del fútbol

El entrenador del Manchester City quiso explicar lo que significa para él el fútbol, definiendo lo más básico, pero dando un toque empresarial: «El fútbol es un negocio que consiste en que el día que el árbitro pite y empiece el partido tú lo ganes. Aparte de eso si somos más o menos amigos eso no importa. Esto es un negocio. Y aquí estoy yo con el objetivo de sacar lo mejor de los jugadores. Tienen que jugar bien en beneficio de nuestro club y para que la afición esté contenta. Tener buenas relaciones es fantástico. Pero para mí sean buenas o malas es lo mismo porque esto es un negocio«.

Cambios en el fútbol inglés

La llegada de Pep Guardiola a la Premier League suponía la irrupción de un entrenador con un estilo algo alejado de lo que es el fútbol inglés. De hecho, ESPN considera que ha cambiado por completo la noción del juego que se tenía en Inglaterra. El ex de Bayern o Barça, por el contrario, prefiere mantenerse al margen: «La historia lo juzgará y lo dirá. Creo que sería presuntuoso de mi parte decir que hicimos algo diferente a lo que se hizo antes. Puedes decir, sí, que hicimos las cosas a nuestra manera. Eso lo puedes decir con seguridad».

A continuación, pues, relata cómo veía entonces él el fútbol inglés: «Era muy directo, box to box, con muchas disputas de balón. Nosotros intentamos no hacer nada de eso. Para eso vine aquí. Sentí la sensación después de la segunda vez que ganamos la Premier que ya lo hicimos. Que vinimos aquí para eso y ya lo hicimos. Pero cuando te sientes bien y crees en ti mismo y en lo que hacemos piensas: ‘¿Por qué no, por qué no tratar de llevar esto más lejos?‘».

La evolución del fútbol

En los últimos años, el fútbol europeo parece regirse por un modelo basado en el físico y la velocidad como armas más letales. La preparación a nivel técnico y táctico cada vez es mayor y el poderío de los clubes supone la principal diferencia con respecto a sus rivales. Guardiola, pese a su estilo diferente, también ha entrado en esa categoría de equipos ciclón. ¿Cómo es posible respetando su propia seña de identidad? Así lo explica: «Porque para jugar rápido, primero debes jugar lento. Y para jugar hacia adelante, primero debes producir. Cuando estás un poco más lento, ves las cosas más claras, lo que te hace interiorizar ciertos movimientos y cualidades. La toma de decsiones en las situaciones más complicadas, en las áreas, son más claras y nítidas».

Por último, relata el fútbol actual de una manera más realista: «Por supuesto que me encantaría hacer todo a 200 kilómetros por hora y marcar 200 goles en diez minutos, pero eso es imposible. Me gusta un juego más pausado, no lento, para que en el momento adecuado podamos utilizar mejor las cualidades de los jugadores. Por suerte aquí en Manchester tenemos muchos y muy buenos».

TOMADO DE DIARIO AS