Antoine Griezmann, delantero del Barça, fue uno de los grandes protagonistas de la final de la Supercopa de España tras anotar un doblete contra el Athletic Club, pero su buena actuación no fue suficiente para llevar el título para Barcelona.

A la conclusión del partido, Griezmann fue el primer jugador del Barça en dar la cara y confesó que el equipo se marcha de La Cartuja tocado tras tener a tocar la victoria y que cometieron errores en las jugadas de estrategia que les costaron la final.

“Estamos enfadados, jodidos y tristes. Son errores que hay que mejorar y parece que cada partido es lo mismo. El único camino es trabajar para ganar títulos y hay que ir a por ello. Cuando pierdes una final tienes todos los sentimientos malos que puedes tener. Sabemos que los equipos de Marcelino trabajan muy bien, presionan muy bien. Esto es lo que tiene el Athletic, que lo dan todo hasta el último minuto. Cometimos errores en la estrategia y habrá que verlos y trabajar. Ellos han trabajado muy bien el partido. Nos han presionado y no nos han dejado jugar. Cuando nos pusimos 1-0 que nos hagan un gol tan rápido no puede ser”, sentenció Griezmann, que profundizó en su análisis sobre los errores en las jugadas a balón parado.

“Hemos defendido mal, no hablamos. Hay que trabajarlo durante la semana y mejorar en eso, porque son detalles muy importantes que pueden definir un partido. Cuando sale el balón o cuando hay que empezar a correr, alguien tiene que gritar. Tenemos que trabajarlo”, señaló el delantero francés, que no ocultó su satisfacción por haber podido marcar dos goles que casi dan la Supercopa al Barça.

“Los goles a veces entran y a veces no. Lo importante era ganar. Estoy en el buen camino y ojalá podamos seguir así. Tenemos tres competiciones importantes y hay que salir a por todas, a ganar lo que queda”, dijo Griezmann, que sobre la acción de la expulsión de Messi apuntó que “no sé que ha pasado, no he visto la jugada”.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO