Álex Aguinaga, figura histórica del fútbol ecuatoriano, se refirió sobre aquel interés que el AC Milán tuvo por él a finales de los años 80 que pudo haber sido un traspaso sin precedentes para la época.
En una extensa entrevista con Diario EL UNIVERSO, Aguinaga contó como llegó a México pese al interés de los italianos en 1989: "Tuve oportunidades de ir a Europa en 1985 y 1988, y en 1989 cuando ya no estaba en Deportivo Quito. Cuando juego la Copa Libertadores la gente de México fue a Ecuador y habló conmigo y yo doy la palabra para venir al fútbol mexicano. La dirigencia del Quito me pedía que reconsiderara esa opción de dejar México e ir a Colombia primero, como fue en su momento, y después a Italia. Pero yo les dije que no, que mi palabra valía mucho más que un contrato firmado y terminé en México".
Explicó el monto del traspaso: "280 mil dólares, en 1989. Se decía que el AC Milan iba a ofertar 3 millones, pero era un tema que no me correspondía a mí; yo tenía que decidir de acuerdo a lo que son mis creencias, y en lo económico esos 280 mil dólares eran para Deportivo Quito, yo tenía un porcentaje firmado con ellos. De todas maneras sabía yo que iba a otro balompié y ya había alcanzado el techo en el fútbol ecuatoriano".
Además, recalcó que cuando empezó a destacar con el Necaxa tuvo ofertas de Argentina, Brasil, España, Francia, Italia e inclusive de regresar a Ecuador (lo hizo en el 2003 con Liga de Quito) pero el siempre priorizó la estabilidad y tranquilidad de la familia: "Siempre le decía al Necaxa que tenían la primera opción cuando había esa posibilidad. Para mí era importante saber si ellos querían que yo continuara".