El Barcelona vuelve a ser el equipo de LaLiga que tiene el límite salarial más alto. Ha aumentado 38,529 millones de euros su tope: pasa de 632,9 a 671,429. El Real Madrid continúa segundo, con 641,049 (+74,55). El Atlético se mantiene como el tercer equipo que más puede invertir en el salario de sus jugadores (348,5) y sigue reduciendo distancias con el primero (322,929).
Todos los equipos de Primera División han aumentado el límite salarial, salvo Villarreal (-539 euros) y Leganés (-782). Los que tienen el tope más bajo de la categoría son el Granada (35,461), Valladolid (32,034) y Mallorca (29,968).
El límite salarial es el importe máximo que cada equipo de Primera División puede realizar para cubrir el gasto en jugadores, primer y segundo entrenador, el preparador físico, la cantera y otras secciones (plantilla no inscribible). Viene marcado por la diferencia entre los ingresos y los gastos estructurales resultantes en los presupuestos de cada equipo. Además, en este tope salarial están incluidas las partidas destinas a salarios (fijos y variables), seguridad social, primas, gasto de adquisición (incluidas las comisiones para agentes) y amortizaciones (importe de compra de los jugadores imputado anualmente en función del número de años de contrato del jugador).
Es cada equipo el encargado de proponer a la patronal su tope salarial. Posteriormente, el Órgano de Validación de LaLiga debe aprobar ese límite propuesto por los clubes o rectificarlo hasta que la cifra garantice la estabilidad financiero del propio equipo. No obstante, no todos los equipos proponen su límite máximo, sino el que estimen oportuno para ajustarlo a sus presupuestos (siempre y cuando no supere el límite máximo). Además, que se marque un tope no implica que este sea consumido en su totalidad y también puede ser modificado posteriormente (tras una nueva ventana de mercado, la llegada de más patrocinadores, etc.).