El partido, ahora, será en una cancha sin pasto ni arcos, sino llena de escritorios, papeles y burocracia. Con los famosos “gordos vestidos de traje” que bautizó Daniel Osvaldo tiempo atrás definiendo qué hacer con la batalla que Lionel Messi le planteó a la Conmebol frente a los ojos y oídos de todo el mundo. Porque a esta hora, ya con Brasil guardando en sus vitrinas una Copa América repleta de polémicas, los dirigentes de la AFA aguardan cuál será el próximo paso de la confederación sudamericana respecto a la sanción para el 10. Y no sólo por las consecuencias de la injusta roja que vio contra Chile: al crack le podría caber una dura suspensión por sus declaraciones post partido, en la que habló de corrupción y de que la competencia estaba arreglada para el local.

Conmebol tiene la potestad, a través de su unidad disciplinaria, de abrirle un expediente a Leo por sus acusaciones. Si eso sucediera, la Selección se quedaría sin su máxima figura como mínimo por dos partidos. Y como máximo… mejor ni pensar, porque si la entidad decidiera declararle la guerra a la AFA y a su estrella, se podría perderse una buena parte de las Eliminatorias. La cuestión es que Alejandro Domínguez, mandamás de la confederación, al menos hasta antes de la Copa América, no tenía ninguna intención de ponerse a Messi en contra, por todo lo que representa no sólo para Argentina sino para el planeta entero. Sólo que el dirigente paraguayo no contaba con que el 10 sea quien mostrara los dientes y asuma un rol maradoneano. ¿Y ahora?

Ahora la discusión es política. Las sanciones, generalmente, se muñequean, argumentan y justifican según la cara del cliente…. Por caso, en 2017, cuando Messi insultó al línea brasileño Emerson Augusto do Carvalho en una victoria 1-0 sobre Chile rumbo a Rusia 2018, la FIFA accionó de oficio y lo sancionó por cuatro fechas, pero luego el TAS lo revirtió por un vicio en el procedimiento (le habrían pedido al juez que agregara las puteadas en el informe) y el 10 pudo jugar los cuatro partidos restantes. Domínguez ya era el presidente de Conmebol…

A todo esto, AFA tiene una carta para escalar el nivel del conflicto. La UEFA, enfrentada con la FIFA, invitó en frebrero a la Selección a participar de la Liga de las Naciones y lo que en principio tuvo una respuesta negativa de parte de Chiqui Tapia, podría cambiar si se decide romper con la Conmebol. De hecho, hasta podría sumarse a la UEFA, como sucedió con Israel en su momento o con Australia a la confederación asiática.

Mientras, se siguen levantando voces a favor y en contra del accionar de Messi. Qué Lío que se viene…