Ya es oficial. El Bayern no ejecutará la opción de compra que tenía por James Rodríguez (27 años). El club alemán estaba obligado a comunicar al Real Madrid antes del 15 de junio si compraba al colombiano por 42 millones de euros (de forma unilateral) después de una cesión de dos temporadas por las que ya desembolsó 13 millones de euros, pero no ha necesitado consumir ese plazo. Karl-Heinz Rummenigge, director general de la entidad muniquesa, ha anunciado este martes que James no continuará en el Bayern. «La decisión con James se ha tomado en principio. Estaba conmigo y me dijo en una conversación personal que le pedía al club que no ejecutara la opción. En estas condiciones, no tiene sentido. Él quiere jugar, ser un jugador regular. Eso no está garantizado aquí. Personalmente lo lamento», declaró el dirigente a Sport Bild. Rummenigge ya confesó el pasado 27 de mayo que en ningún caso iban a comprar a James para después venderle a otro club: «No traficamos con personas».

La llegada de Kovac al banquillo del Bayern le cambió el paso a James, que con Heynckes en su primer año sí se sintió protagonista. Sin embargo, ha vivido más de una curva con el nuevo entrenador en su segundo año de cesión. Esa falta de feeling ha ido cambiando progresivamente la postura del club con respecto a James. Si el pasado 8 de marzo, Rummenigge afirmó con rotundidad que el cafetero jugaría en el Bayern la próxima temporada («Estamos muy contentos con él, creo firmemente que continuará»), a comienzos de mayo Salihamidzic, director deportivo, comenzó a modificar el discurso oficial y negó que se tuviera ya tomada una decisión con el cafetero. Este martes, se ha hecho oficial su no continuidad. Lo cierto es que James no quería seguir en el Bayern y a Kovac nunca le ha llenado el ojo.

Así pues, James, que ahora está concentrado con Colombia para la Copa América, regresará al Real Madrid después de dos años de cesión en el Bayern, donde marcó 15 goles y dio 20 asistencias en 67 partidos. El colombiano desea comenzar la pretemporada con los blancos para intentar convencer a Zidane de que puede ser útil en el nuevo proyecto, pero el entrenador francés tiene decidido ponerle en el escaparate para hacer caja y así afrontar mejor la Operación Entrada blanca. La entidad de Concha Espina pretende sacar más de esos 42 millones por James. La llegada de Zidane al banquillo cerró definitivamente la puerta del Madrid al que fuera máximo goleador (6) del Mundial de Brasil de 2014. Ese verano, los blancos desembolsaron 80 millones por él. Ahora es el Nápoles el que está llamando más fuerte a su puerta. Ancelotti, como ya ocurriera en 2017, cuando se lo llevó al Bayern, le ha telefoneado para proponerle fichar por los italianos. La Juve y el PSG también están atentos al caso. En las próximas semanas se resolverá su futuro.