Un empate con sabor a derrota, así se sintió para el Liverpool el resultado final del duelo que se llevó a cabo en el Goodison Park. El equipo de Jürgen Klopp no pudo con el esquema defensivo de Everton y pese a haber tenido algunas llegadas, no fue capaz de abrir el marcador. Ahora el Manchester City es el nuevo líder de la Premier League.

Un duelo que en el primer tiempo tuvo solo dos ocasiones de gol, las dos para el Liverpool y para Mohamed Salah, la primera un remate desde el área que fue controlado por Pickford y la segunda un mano a mano que terminó ganando el guardameta rival. En el segundo tiempo el partido estuvo más movido, con llegadas para los dos equipos, sin embargo, eso no fue suficiente y el cero terminó quedándose en el marcador.