Marcelo Gallardo sostuvo que lo mejor de River fue haberse llevado los tres puntos de Guayaquil con el triunfo ante Emelec. El técnico fue muy autocrítico con el segundo tiempo de su equipo.

«Emelec no venía jugando con tres defensores, por eso me sorprendió ese esquema, pero no cambió mucho lo que vinimos a hacer. El primer tiempo lo controlamos bien, no sufrimos demasiado más allá del mano a mano que tapó Armani, pero hicimos el gol y nos dio tranquilidad. En el segundo tiempo no controlamos pelota ni terreno. Nunca nos pasó antes. El calor que hacía adentro de la cancha es como el de acá (la sala de conferencia de prensa del estadio Capwell). Eso nos imposibilitó dominar el juego a través de nuestra calidad de pase, que no fuimos claros para iniciar los ataques con mayor precisión. Sufrimos demasiado estar en terreno nuestro todo el tiempo. No estamos acostumbrados. Se notó que las repuestas eran menores. Fue por un calor infernal. Lo valorable son los tres puntos que nos posicionan bien en el grupo», dijo el entrenador.

Al técnico le preguntaron si se había demorado en los cambios. «A cómo venía el partido creo que debería haber guardado una carta en los cambios, la lesión de Zaracchi nos complicó también, debimos hacer cambios posicionales. Así que no creo que demoré. Si podía hacer siete cambios los hacía», respondió.

«Tengo que hacer un análisis dividido en dos, lo que sí propusimos en esos primeros 45 minutos y después lo que pasó en el segundo tiempo. Yo le doy mérito al rival, que nos metió en nuestro terreno, y el calor infernal no nos dejó salir de nuestro campo, por falta de lucidez y energías. Desde ese análisis la división es claramente matemática, tres puntos que conseguimos en los primeros 45 minutos. Después nos defendimos como pudimos en la segunda mitad», agregó.

A Franco (Armani), cada vez que lo ponen a prueba, está presente. Es cada vez más evidente que cuando nosotros necesitamos a él, está presente, cada vez su imagen es más grande. Hablé con él en la semana de seguir como hasta ahora», agregó.

«Rodrigo (Mora) estaba con problemas y decidí la frescura de Borré. Era un partido para estar fresco y entero», explicó.

«Esto es dinámico, tenemos mucha carga de partidos. Hoy sufrimos en el segundo tiempo por cuestiones de temperatura. Tenemos que ir viendo la recuperación, más allá de la formación que tiene continuidad, tengo que ver la respuesta física. Y también, actuaciones. Acá nadie tiene el puesto comprado, nadie juega con el nombre, es así desde que asumí», recordó, molesto porque le preguntaron por el nivel de Pratto.

«Contra Arsenal (domingo) van a jugar futbolistas frescos porque hoy se hizo mucho esfuerzo», cerró. Así dejó abierta la puerta a una rotación.