El italiano Carlo Ancelotti ya es pasado en el Bayern Munich, que le ha destituido cuando todavía le quedaba año y medio de contrato. Es el fin de la historia de un desencuentro. El detonante del cese fue la derrota por 3-0 ante el PSG, pero el deterioro de la relación del entrenador con el club y con el vestuario, databa de hace tiempo.

La fórmula de Ancelotti era dosificar los esfuerzos, no ponerle más intensidad de la necesaria a ciertos partidos y determinadas fases de la temporada y las rotaciones. La estrategia no funcionó. El Real Madrid eliminó al Bayern en cuartos de final de la Liga de Campeones pasada, pero en ese momento no se responsabilizó de ello a Ancelotti.

Al final, justamente esos elementos –la rotación, la dosificación de la intensidad- fueron parte de lo que lo llevó al cese, además de que el vestuario en las últimas semanas se le había ido de las manos.

El presidente de la institución alemana, Uli Hoeness, aseguró en una entrevista a Funke Sport que: «Ancelotti tenía a cinco jugadores en contra suya, lo cual era insostenible. Como entrenador, no puedes tener a jugadores estrella en tu contra. En mi vida aprendí un dicho: el enemigo en tu cama es el más peligroso. Por eso tuvimos que tomar medidas».

Su primer distanciamiento fue con Thomas Müller, con quien Ancelotti no sabía muy bien qué hacer en su esquema. En los partidos importantes solía estar fuera, lo que producía resquemores, pues, tras la retirada de Philipp Lahm, Müller se había convertido en la figura de identificación del club.

Luego siguió un desencuentro con Franck Ribery. Y se sumó que Arjen Robben se solidarizó abiertamente con el francés y además hizo unas declaraciones en las que dijo que cuando Müller estaba en el campo él jugaba mejor por los espacios que le abría.

Contra el PSG, Müller estuvo en el campo, pero Robben, Ribery y Mats Hummels se quedaron fuera de la alineación titular.

Nadie lo entendió. El sentido de la rotación suele ser reservar jugadores claves para partidos importantes y tres piezas claves se habían quedado por fuera del duelo ante el rival más fuerte en la fase de grupos de la Liga de Campeones.