El Whitehawk, club que milita en la National League South, sexta división del fútbol inglés, rozó la clasificación a la siguiente ronda de la FA Cup. Pero su partido ante el Stourbridge no pasó del empate 1-1, porque el árbitro Robert Whitton pitó el final del encuentro a segundos de que el balón ingrese en la portería y el tanto no fue convalidado.

Se disputaba el último minuto del descuento. Tras varios despejes de la defensa del Stourbridge, el balón cayó en los pies del argentino Javier Favarel, quien lo impactó sin que toque el suelo y su remate terminó dentro de la portería rival. Pero justo antes de que la pelota toque su pie, el colegiado hizo sonar su silbato y dio por terminado el partido.

Al ver que el juez no cobró el gol, todos los jugadores del Whitehawk corrieron a protestar el fallo. Se tomaban la cabeza, no podía creer lo que estaba pasando. Las excesivas protestas provocaron la expulsión del portero Ross Flitney. El 1-1 implica que habrá un desempate, ya que no hay penales ni tiempo extra en la FA Cup.

Tras el partido, los clubes iniciaron una discusión en Twitter. «En el reglamento, no hay referencias de cuando el árbitro debe terminar un partido. Discutible», escribieron en el perfil del Stourbridge. «Creemos que la pelota estaba en el aire y nuestro jugador tenía claramente intenciones de esforzase por anotar», respondieron los del Whitehawk.

El Northampton Town espera por el ganador de esta llave en la segunda ronda del torneo. El próximo partido entre Whitehawk y Stourbridge se jugaría el 14 de noviembre, aunque todavía no está confirmado por la Federación Inglesa.