Yaya Touré no tiene intención de facilitar su salida del Manchester City y por mucho que no entre en los planes de Pep Guardiola apurará la temporada que le resta de contrato.

«Se va a quedar y peleará por un puesto» aseguró su agente Dmitry Selyuk, quien en declaraciones citadas por diversos medios británicos negó estar negociando su marcha. «No estamos en conversaciones con otros clubs» sentenció.

Según una fuente cercana al club británico, Touré está dispuesto «a desafiar a Guardiola a ojos de todo el mundo», demostrando que si el entrenador catalán sigue sin contar con él será por una cuestión personal y no deportiva, en una situación no muy diferente a la de los otros señalados por el técnico.

Bajo contrato hasta junio de 2017, el fichaje de Pep Guardiola por el Manchester City alertó a varios clubs europeos que, conocedores de las malas relaciones entre el técnico catalán y el jugador marfileño, mostraron interés en su incorporación. Pero el precio del trasvase echó por tierra cualquier acercamiento.

Según esta misma fuente, el City estaría dispuesto a traspasar a Toure «por un precio ínfimo» pero el futbolista no se plantea tal posibilidad, aconsejado por su representante, porque ninguno de los clubs que se interesaron por él, con el Inter de Milán al frente, estaba dispuesto a mantener, ni acercarse, los casi 13 millones de euros de salario anual que disfruta en el Etihad.

Guardiola mantiene un discurso próximo con el centrocampista pero el Manchester City empieza a trabajar contra el tiempo por encontrar una solución a esta difícil situación, sabiendo que Touré no dejará el club si no recibe un finiquito millonario e inasumible por el club.