La mañana de este domingo, las fotos y declaraciones del arquero de Independiente del Valle, Librado Azcona, fueron parte de la portada del prestigioso Diario OLÉ. El cancerbero 'negriazul' espera que su equipo gane y le pueda atajar un penal a Carlos Tévez. La euforia se nota en el portero y concedió una entrevista curiosa.
A continuación, la nota del medio de información antes mencionados a su disposición:
Librado Azcona, el arquero héroe que eliminó a River en el Monumental, redobla la apuesta de cara a la semifinal, pese a que admira a Carlitos, al Pato Abbondanzieri y a que se define como "simpatizante" de Boca. Tanto, que cierra los ojos y se sueña festejando en la Bombonera. ¿Tiembla Guillermo?
¿Dónde estabas cuando Boca ganaba todas las Libertadores con Bianchi?
-En Paraguay, viendo los partidos en la casa de mi papá, en Capiatá. Yo me imaginaba jugando en la Bombonera y por suerte ahora se me está dando. No soy hincha de Boca, pero siempre me gustó por cómo jugaba, por todas las copas que logró, porque ganaba todo, por los jugadores tremendos que siempre tuvo. Se podría decir que nunca fui hincha, pero sí simpatizante.
El Valle de los Chillos es una ciudad tranquila, ubicada a 20 minutos del centro histórico de Quito, y pertenece en gran parte a la localidad de Rumiñahui con su capital Sangolquí. Hace cuatro años que Daniel Librado Azcona vive ahí con su mujer Graciela y con su hijita Daiana Luján. Liga de Loja fue su entrada en Ecuador, cuando decidió irse de Paraguay por falta de oportunidades, y después Independiente del Valle se convirtió en su despegue y consolidación. “No tuve chances en mi país, porque el puesto de arquero es complicado. Siempre buscaban a un experimentado y eso, para los que estamos empezando, es un problema”, dice sin resentimiento sobre esos comienzos en los que, antes de ser profesional, supo disfrutar del Boca del Virrey.
Rumiñahui es también el nombre del estadio de IDV y ahí, desde lo que hizo por el equipo en esta Copa Libertadores, Azcona es rey. Fue la gran figura en la revancha de octavos cuando eliminaron a River en el Monumental y también, en los penales de cuartos frente a Pumas de México. “Fue impresionante lo que nos pasó con River. Fueron 95 minutos en los que nos tuvo ahí sin darnos respiro, pero por suerte pudimos seguir adelante. Nunca me había pasado vivir un partido tan complicado”, explica el paraguayo nacionalizado ecuatoriano, que ayer estuvo viendo a sus compañeros ante Delfín, en el quinto y último partido por el torneo local antes de enfrentar a Boca.
-¿Cómo se vive dejar afuera al último campeón?
-Cuando terminó el partido no era consciente de todo lo que habíamos conseguido. Dejarlo afuera es algo que no podíamos creer, no sabés cómo asimilarlo. Barovero me felicitó cuando lo fui a saludar, por el gran trabajo que había realizado. Me dijo que siguiera adelante.
-¿Barovero te pidió que eliminen a Boca?
-No, no, no me dijo, jaja. Me dio su camiseta.
-Y también te fue bien en los penales contra Pumas...
-No soy de atajar tantos penales, tampoco los practicamos. El profe, antes del partido, me entregó un video sobre los que pateaban de Pumas y después me preguntó si lo estaba viendo. Le dije que no hacía falta...
-¿Cómo tomás la decisión en las definiciones?
-Trato de aguantar hasta el último momento y ahí tomo la decisión. En los penales contra Pumas me tiré los tres a la derecha y pude atajar varios.
-¿Te cambió la vida?
-No, no. Uno trabaja día a día para conseguir objetivos, hasta ahora los tenemos bien claros. Somos conscientes de que somos el que menos chances tiene para ganar la Libertadores por los equipos grandes con estrellas y figuras que también están en semifinales. Nosotros no tenemos figuras ni estrellas, pero damos batalla.
Los diez días de vacaciones que tuvo después de lograr la clasificación a las semifinales, Azcona los aprovechó para pasarlos con su familia en Paraguay. Con sus padres, una de sus hermanas y su hermano menor, al que no le interesa el fútbol sino el estudio. Y como nunca antes fue noticia en su tierra: la prensa copó su casa en Capiatá. Aunque los medios suelen llamarlo por el segundo nombre que eligió la abuela (Librado), para su familia es Dany. La hermana restante vive en la Argentina y nunca la pudo visitar. “Sólo fui las veces que me tocó jugar ahí”, cuenta.
-¿Qué te dice tu familia?
-Que está muy orgullosa de mí por lo que he conseguido, aunque yo sé que no conseguimos nada todavía. Pero el logro para el fútbol ecuatoriano es enorme y el reconocimiento de mi papá y mi mamá es muy importante para mí.
-¿Y tu hermana que vive en la Argentina es hincha de Boca?
-Es de San Lorenzo. Por suerte no es de River ni de Boca, ja.
Entre tantas conquistas, con triunfos históricos frente al Palmeiras, Real Madrid, Cruz Azul, Santos y Milan, Azcona no reparaba tanto en Riquelme, Palermo, Guillermo o el primer Tevez. Ya tenía su espíritu de arquero e, inevitablemente, miraba para el arco. “Me encantaba como atajaba Abbondanzieri, su saque era espectacular”, cuenta el arquero de IDV, quien también admira a Barovero. “Soy fanático de él. Por suerte cambiamos la camiseta cuando jugamos en Quito”, agrega.
-¿Cómo ves a Boca?
-Ahh, durísimo. Es uno de los candidatos, pero nos preparamos al máximo. En esta instancia no hay margen de error.
-¿Qué estuviste viendo de rival?
-Tiene jugadores tremendos, la gran figura de Tevez, si está inspirado no se lo puede ni marcar. Si le dejamos espacios nos va a pintar la cara.
-¿Te imaginabas estar en este lugar?
-Uno sueña con poder jugar contra los grandes y yo siempre soñaba jugar contra Boca. Ahora, gracias a Dios, ese sueño se me está cumpliendo.
-¿Y hoy con qué estás soñando?
-Estoy soñando en el partido, jugando en la Bombonera, me veo realmente haciéndome figura. Ojalá se pueda concretar.
-¿Te imaginás situaciones? ¿Cuáles?
-Atajándole un penal a Tevez, jaja.