Neymar es el referente de la actual, y cuestionada, selección brasileña. Pero al parecer, en su país consideran que está en deuda con esa condición y lo critican por su rendimiento y por sus actitudes.

Globoesporte realizó un informe y señaló que desde 2015, suma más amonestaciones que goles, con cinco amarillas y cuatro anotaciones en diez partidos jugados.

La última tarjeta la recibió en el empate con Uruguay, por lo que quedó suspendido para el duelo de hoy ante Paraguay. Por eso también molestó que tras el duelo con La Celeste, y desligado de la selección por la amarilla, saliera a celebrar antes de regresar a España.