El Comité de Ética de la FIFA ha anunciado este martes la apertura de procedimientos formales contra seis altos directivos del fútbol alemán vinculados a la elección del país como sede del Mundial 2006, entre ellos Franz Beckenbauer, presidente del comité organizador de aquella competición que será investigado por supuestos pagos indebidos, asociados a cargos de soborno, corrupción y aceptación de regalos.

Además de Beckenbauer, la FIFA también ha abierto procedimiento contra los expresidentes de la Federación Alemana (DFB) Wolfgang Niersbach y Theo Zwanziger, los exsecretarios generales Helmut Sandrock y Horst R. Schmidt, y el exdirector financiero Stefan Hans.

En los casos de Beckenbauer, Zwanziger, Schmidt y Hans, la FIFA investigará posibles pagos indebidos para lograr que Alemania organizara el Mundial de 2006 y que podrían quebrar hasta seis artículos del Código Ético de la FIFA asociados a cargos de soborno, corrupción y aceptación de regalos.

En cuanto a Niersbach y Sandrock, podrían haber quebrado cuatro artículos relacionados con normas generales de conducta, lealtad, deber de cooperación y conflicto de intereses.

«El presidente del órgano de instrucción, Cornel Borbély, liderará la investigación y examinará las pruebas relevantes a su debido tiempo. Todos los casos serán examinados con equidad y todas las partes tienen presunción de inocencia», subrayó la FIFA.

Este anuncio llega tres semanas después de que la Federación Alemana concluyera que «no hay pruebas» de compra de votos para organizar el Mundial 2006, pero sin atreverse a descartar esa posibilidad, durante la presentación del informe confeccionado para analizar dicho asunto.

«No hay pruebas de compra de votos», anunció el pasado 4 de marzo Christian Duve, representante del bufete de abogados Freshfields que se ha encargado de realizar el informe. Sin embargo, Duve aclaró que su firma no ha podido hablar con todos los involucrados y que, por ello, no pueden descartar rotundamente que ese presunto soborno no se produjera.