Hakan Sukur fue un gran delantero turco que hizo historia en aquella selección que llegó a ser tercera en el Mundial 2002 y además marcó el gol más rápido de los mundiales (11 segundos) en un encuentro ante Corea del Sur, pues hoy se ha confirmado que Sukur puede ir a la cárcel por cuatro años.
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¿Por qué? Se lo está acusando de insultar en su cuenta de Twitter al presidente de su país Recep Tayyip Erdogan y a su hijo según revelan en Turquía.
Pese a que Sukur mencionó que los mensajes no eran para el presidente, la corte que lleva el caso considera que sí hablaban de Erdogan por ende el panorama para el ex goleador que vive actualmente en Estados Unidos es complicado.