Para muchos su biotipo físico no es la de un jugador de fútbol, acostumbrados a ver a aquellos futbolistas totalmente atléticos. Sin embargo, aquel jugador que le dicen «gordo» ha demostrado en toda su carrera que no ha necesitado que lo admiren por que sea musculoso, sino por su talento.
Para Luis Caicedo el fútbol va más allá de lo bonito, su capacidad dentro de un campo de juego puede verse reflejada en un caño, una chalaca, un disparo potente, pero eso es apenas algo básico. A él le sobra lo que hoy en día todo hincha reclama en este deporte, aquello que se ha visto empañado por la codicia humana, al Gordo Lucho le sobra la garra con la que se debe jugar y sudar la camiseta.
Su carrera no ha sido fácil, ha tenido que luchar contra aquellos que lo han satanizado por ser gordo, que lo han retirado una y otra vez. Él ha decidido que la única forma de demostrar que está apto para cualquier reto, es dentro de la cancha, haciendo lo que más sabe, siendo un líder capaz de levantar a un equipo.
No necesita de padrinos, porque esas cosas no van con él. Su ideología es ganarse a pulso, con esfuerzo y dedicación un puesto, una titularidad, unos minutos, porque siempre tiene el deseo de triunfar.
¿CÓMO LLEGÓ A BARCELONA?
Antes de llegar al Ídolo, parecía que la carrera de Caicedo quemaba sus últimos cartuchos. Hasta para eso hay que tener valentía, llegar al club más popular de Barcelona, sumergido en una crisis tremenda, con una dirigencia de paso fugaz.
El Pocho Harb, contactó con el representante Jose Luis Chiriboga. El que fuera Presidente, vio en el jugador su gran temperamento, buen dominio de la pelota, garra, disparos de larga distancia, considerándolo de los mejores futbolistas del Ecuador. Se contactó con él, y éste le respondió “tranquilo Pocho, que yo vengo con todo”.
Luis no le teme a los retos, y después de firmar un contrato de $5,000 dólares mensuales, por un préstamo de $20,000 y una prima del mismo valor, llegó al club más popular. En total en el 2011, el “Gordo” Caicedo le costó $100,000 a Barcelona.
¿QUÉ DEBE HACER PARA SER TITULAR?
Si hablamos de juego, Caicedo tiene que estar en el 11 titular, si decimos por garra, no puede ir al banco, y si decimos por números, puede ser Luis y 10 más.
El mediocampista tiene casta de campeón, fue uno de los artífices del único campeonato que consiguió Olmedo en el 2000, y fue también parte fundamental de que después de 14 años, Barcelona consiguiera su última corona en el 2012.
Los números dicen que de los jugadores del plantel amarillo, es el más rendidor, en 77 partidos jugados, ganó 41, empató 22 y perdió apenas 14, un 63% de efectividad. Muy atrás quedan aquellos mimados que parece que tuvieran el puesto comprado.
Lo acusan de viejo, de gordo, le han traído extranjeros como Olmedo, Duscher, Vargas, que se llevaron la plata y solo provocaron escándalos. Le han traído nacionales, Flavio Caicedo, Alex Bolaños; sin embargo el último partido se lo ganó por una acción de Gordo Lucho.
Desde los retirados en los años 60’ Lecaro y Macías, e ido en los 90’ como Montanero, en Barcelona no hay líderes, y Caicedo parece ser uno de esos, aquello que necesita Barcelona para poder levantarse de estos últimos meses en el que solo ha vivido en tinieblas. Y entonces nos preguntamos ¿Por qué Lucho Caicedo no es titular?
