Cuando se habla de batir registros en el Barcelona, todas las miradas se dirigen hacia Leo Messi, pero la historia moderna de la entidad azulgrana se ha escrito gracias a un futbolista que también ha batido muchos récords en el club: Xavi Hernández. El centrocampista de Tarrasa alcanzó esta noche la mítica cifra de 700 encuentros oficiales con la camiseta barcelonista.
Hace una semana era Sandro Rosell el que elogiaba al catalán, asegurando: «Es el mejor jugador español de todos los tiempos, al menos atendiendo a los números». El presidente tenía razón. Xavi no sólo es el jugador en activo con más partidos oficiales en un mismo club, sino que también es el que más títulos tiene.
Louis van Gaal le hizo debutar en Liga el 3 de octubre de 1998, antes lo había hecho en la Supercopa, y las vio de todos los colores. Los malos momentos se alternaron con los buenos y con los excelentes. Rechazó una megaoferta del Milan cuando aún era un niño y no tenía el sitio asegurado, tuvo que luchar por desterrar las comparaciones con Guardiola y hasta con una grave lesión de rodilla. Pero se sobrepuso a todos los problemas y a todas las épocas, siendo imprescindible para todos los entrenadores que ha tenido. Pilar del Barça de Rijkaard, del Pep Team y también de la selección española que conquistó dos Eurocopas y un Mundial, Xavi ha ido coleccionando títulos y partidos, así como el reconocimiento del mundo del fútbol.
Finalista en tres ediciones del Balón de Oro (2009, 2010 y 2011), hasta Pelé le dijo que con futbolistas como él al lado habría marcado 3.000 goles. Y puede seguir haciendo historia porque aún le quedan dos años y medio más de contrato. En Europa puede ser el que más encuentros haya jugado. Suma 143 partidos y sólo tiene por delante a Raúl (144) y a Giggs (149).