Monterrey sigue su camino al Tricampeonato de CONCACAF. Aunque ahora sólo empataron frente a Xelajú de Guatemala, cerraron la eliminatoria con un global de 4-2, resultado que les permite mantenerse como el máximo candidato para refrendar su cetro.
Aprovechando la ventaja de dos goles qué labró en el juego de Ida, Vucetich decidió jugar el partido con un cuadro alternativo, usando a elementos que han tenido poca ó nula acción en la Liga MX, ejemplo: Juan De Dios Ibarra, Leobardo López, César De la Peña, Edgar Solís, y Guillermo Madrigal.
Y esta decisión sí pegó en el partido, ya que Xelajú con poco que perder y mucho que ganar saltó a la grama del Tecnológico con la libertad de generar su futbol.
Pedro Chinchilla y Allan Aleman fueron los ofensivos visitantes que más se notaron, pero ambos se toparon con Juan De Dios Ibarra, portero albiazul, quien estaba atajando todo lo que le llegaba.
Un Rayados adormilado también tuvo algunas opciones pero sin tanto peligro. Guillermo Madrigal, joven canterano, falló por lo menos dos ocasiones claras y Leobardo López fue el que más estuvo cerca al estrellar su remate al poste.
El primer tiempo se acababa y todo indicaba que el marcador se iría sin anotaciones, pero todo cambió en un instante y Xelajú al 44’ logró el gol que los ilusionaba con el milagro.
En un tiro libre por derecha, Sergio Morales mandó servicio al área, y ahí apareció Fredy Taylor, quien envió un testerazo sin vehemencia al fondo de las redes. La visita sorprendía pero era un premio justo a lo que se había visto a lo largo de 45 minutos.
El empate dejaba un mal sabor a la afición, aunque aún había la tranquilidad que el marcador global les favorecía 3-2.
Vucetich para la parte complementaria decidió sacar a Miguel Morales y meter a Walter Ayoví, cambio que revolucionaría un poco el partido a favor de los del Cerro de la Silla.
Y así fue que al 63′ hubo un tiro libre a favor de Monterrey, aunque la pelota estaba a unos 30 metros fuera del área, Ayoví le pegó con mucha violencia y la mandó guardar. El gol era el de la tranquilidad, y que ponía el global 4-2. El resto del partido era historia.
El visitante se desinfló y los albiazules en el resto de los minutos pudieron aumentar el marcador y llevarse el triunfo, pero volvió a ocurrir que se falló en la definición. Madrigal y Corona la tuvieron pero los balones que tiraban eran desviados.
Rayados sigue con vida en CONCACAF con la firme idea de refrendar su Bicampeonato; en Semifinales iría con el ganador entre el Galaxy ó Herediano, que juegan mañana.