La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) declaró oficialmente como ganador de la Copa Sudamericana de 2012 a Sao Paulo, tras los incidentes del partido de vuelta de la final ante Tigre disputado el pasado 12 de diciembre.
El conjunto brasileño ganaba por 2-0 al descanso del mencionado encuentro (goles de Lucas Moura y Osvaldo) y los jugadores de Tigre se negaron a regresar al terreno de juego para disputar la segunda mitad. Los jugadores del equipo argentino denunciaron que fueron agredidos por guardaespaldas de Sao Paulo en los vestuarios y amenazados con armas de fuego.
Sao Paulo, por su parte, alegó que Tigre no regresó al campo y se inventó los incidentes porque «temía una goleada».
El resultado de 2-0 se ha considerado como definitivo. En la ida jugada en Argentina no hubo goles.
La Comisión de Disciplina de la Conmebol decidió igualmente multar a ambos equipos con 100.000 dólares, además de clausurar el estadio de Morumbí por un partido. Sao Paulo cumplirá esta sanción con ocasión de la visita del Atlético Mineiro en la Copa Libertadores.
Ambos clubes tienen ocho días de plazo para apelar la decisión ante la Conmebol.