¿Cómo frenar a Lionel Messi? La pregunta retumba por la cabeza de jugadores, hinchas y cuerpo técnico de Milan un día antes de recibir a Barcelona en la ida de los octavos de final de la Champions League. Sin embargo, apenas hay soluciones en las respuestas.

«Mi sugerencia es que uno de los hombres de Barcelona -un tal Messi, por ejemplo, quizá hayan oído hablar de él- debería recibir marca personal», dijo el dueño de Milan, Silvio Berlusconi, a la radio Rtl.

Messi liderará mañana al Barcelona en su visita al estadio Giuseppe Meazza. Leo acumula 36 goles en 24 jornadas de la Liga española y cinco tantos en la fase de grupos de la Champions.

El debate sobre cómo frenar al rosarino, que acumula más de un tanto por partido esta temporada, traspaso los muros de Milan. «Con una pistola», bromeó el entrenador de Juventus de Turín, Antonio Conte, tras recibir el lunes el premio al mejor entrenador de la temporada anterior.

La idea de Berlusconi no caló entre otros entrenadores, que sugirieron que la marca personal era una solución simple a un problema que posiblemente no tenga solución táctica.

«A Berlusconi le gusta jugar a ser entrenador», dijo el ex técnico rossonero Fabio Capello. «Habría que poner dos defensores, no sólo a uno», explicó al referirse a cómo frenar al argentino.

Renzo Ulivieri, el presidente de la asociación de entrenadores de Italia y candidato a las elecciones presidenciales del domingo -en un partido opuesto al de Berlusconi-, aseguró que el dueño de Milan está siendo muy simple. «En Coverciano (en un campo de la federación) enseñamos a cubrir al hombre en la zona de marca y estaría sorprendido si nuestros entrenadores lo hacen de forma diferente», dijo Ulivieri.

El entrenador de Milan, Massimiliano Allegri, está trabajando duro para modificar una defensa que concedió cuatro goles en las últimas cinco salidas, todas ante rivales de poco renombre. En la delantera, Allegri no podrá contar con el recién incorporado Mario Balotelli -que llegó en enero desde el Manchester City- y Stephan El Shaarawy, que acumula 15 goles en la Serie A, es duda por molestias en la rodilla.

El vicepresidente de Milan, Adriano Galliani, que dijo que es «increíble» que su equipo se vaya a enfrentar seis veces a Barcelona en dos temporadas, instó a sus jugadores a que olviden a Messi y compañía. «Jugaremos nuestro partido. Jugaremos sin presión psicológica a pesar de que Barcelona es el equipo más fuerte del mundo».

El Milan tiene que mirar a 1994 para poder rescatar buenas noticias en un enfrentamiento directo ante Barcelona. Aquel año, Capello levantó la quinta de las siete Copas de Europa del Milan con un apabullante 4-0 sobre el equipo blaugrana en la final en Atenas.