Neymar estuvo tan cerca del Real Madrid como del FC Barcelona este verano aunque en el caso de la entidad blanca, fue Florentino Pérez el que decidió salirse de la puja por el brasileño. Fue el 20 de agosto cuando de forma oficial Florentino anunciaba a Leonardo de Araujo que desistía del fichaje de Neymar dejando la ‘vía blaugrana’ como única posibilidad de Ney de alejarse de París, aunque finalmente se tratase de una vía muerta.

Florentino siempre ha pensado que Neymar es un jugador extraordinario, un fuera de serie, uno de esos futbolistas que lideran proyectos dentro del campo. Le gusta Neymar y mucho, pero también hay factores extra-deportivos que le frenan. La primera razón por la que Florentino decidió abandonar el intento de fichaje del brasileño es porque la operación la calculaba en no menos de 200 millones de euros.

La intención era abaratar la operación con jugadores que fueran interesantes para el PSG: Modric, Casemiro y Keylor Navas. Sabía Florentino que el PSG prefería traspasar a Neymar al Real Madrid que al FC Barcelona pero que la operación nunca bajaría de esos 200 millones.

Otro de los problemas que veía el presidente del Real Madrid es la ficha de Neymar, que disparaba el techo salarial en el vestuario blanco. Ney está en 30 millones de euros anuales, una cantidad desorbitada.

La operación económica encontraba pros en la generación de ingresos y contratos publicitarios en mercados emergentes. Además, el Real Madrid asestaba un golpe sentimental a su gran enemigo futbolístico a la altura del acometido con Luis Figo. Florentino conocía el pressing al que estaba sometiendo el vestuario azulgrana a su presidente Bartomeu y sabía específicamente que Messi consideraba a Neymar básico para seguir siendo competitivos en Europa.

Por vía de Juni Calafat, su hombre fuerte en los fichajes de brasileños, sabía de primera mano – se reunió Juni con el padre de Neymar y Ney en Paris- que el brasileño quería salir de Paris y que estaba dispuesto a fichar por el Real Madrid. De hecho una de las condiciones para seguir negociando es que Neymar se mantuviera neutral en sus declaraciones públicas. Es por eso que Ney durante prácticamente todo el verano no se decantó por un vestuario u otro, sólo insistía en dejar el PSG.

Neymar fue más allá declarando públicamente su admiración por Sergio Ramos y whasapeando con él y paralelamente estaba en comunicación con Casemiro y Marcelo, sus íntimos amigos.

Pero Florentino acabó decidiendo que era mejor esperar y apostar por Mbappé, sobretodo por los informes que hablaban de las continuas lesiones en el pie y tobillos de Neymar y por la vida díscola salpicada de asuntos tan turbios como la acusación de violación por parte de una mujer brasileña con la que mantuvo una relación por Instagram antes de conocerse en París.

Le costó a Florentino tomar esta decisión porque siempre ha estado enamorado del Neymar futbolista. Veía en él al jugador que haría olvidar a Cristiano y serviría de bandera para el nuevo Real Madrid embarcado en el proyecto faraónico de remodelación del Bernabéu, una obra que mantendrá el legado de Florentino Pérez de por vida.