Un Ronaldo resignado largó esa frase tras un empate con sabor a poco. Si la figura baja los brazos, se complica… “No éramos favoritos, nunca lo fuimos”, dijo. Necesitan ganarle a Ghana y rezar que Alemania y EEUU no empaten.
Portugal quedó acorralado. En una situación impensada, que ninguno de los integrantes del plantel imaginó ni deseó nunca. Cristiano Ronaldo es uno de ellos. Tras el empate con sabor a poco ante Estados Unidos por 2 a 2, en el que perdieron dos puntos claves para aspirar firmes a los octavos de final, la figura del equipo fue determinante con las pocas posibilidades que tienen de clasificar.
“Es casi imposible clasificar”, tiró un CR7 golpeado, después de mostrar en cancha una versión muy alejada de su mejor nivel. “Matemáticamente es posible, pero de hecho es casi imposible, aunque en el fútbol todo pueda suceder”.
El tono resignado del delantero del Real tiene su explicación en que Portugal ya no depende de sí mismo para seguir avanzando. Está obligado a ganar el último partido, frente a Ghana el jueves, y esperar que Alemania y Estados Unidos no igualen porque así clasificarán los dos.
“Pueden ser varios factores, obviamente la temporada fue larga, pero eso es para todos los equipos. Es un factor, no creo que sea por falta de actitud de nuestros jugadores” comentó Cristiano, buscándole una explicación al momento. Y aseguró: “No éramos favoritos, nunca lo fuimos. No vale la pena hablar más de lo que tengo. Todos los días hay noticias en los diarios sobre el gemelo, la tendinitis, lo otro y lo de más allá. Estoy aquí de cuerpo y alma, pero no conseguimos alcanzar los objetivos que queríamos”.