El 9 de diciembre, es decir el miércoles de la semana que viene, es el día en el que Zidane se jugará su puesto en el banquillo blanco. Ese día, el Real Madrid recibe al Monchengladbach en el Di Stéfano con la obligación de ganar para estar en los octavos de final de la Champions.

Un partido a todo o nada para Zidane que en caso de derrota del equipo blanco sería destituido como entrenador del Real Madrid. Eso es lo que está pensando Florentino Pérez, según aseguró la Cope. El presidente del Real Madrid ya comienza a ser señalado por la crisis que está viviendo el equipo y le toca mover pieza en el caso de fracaso total en Europa.

Zidane, por ahora, no piensa dimitir y confía en darle la vuelta a esta situación, pero sabe que si la cosa sigue así, lo lógico es que le destituyan. Algo que, por otro lado, no es plato de buen gusto para los responsables blancos a los que les gustaría que fuese Zidane el que diese un paso al lado si el Madrid se queda fuera de la Champions.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO