Ya es oficial: Luciano Spalletti se convierte en el nuevo entrenador de la Juventus de Turín como sustituto de Igor Tudor, quien llegó en lugar de Thiago Motta, logró buenos resultados y se quedó, pero el mal arranque de temporada de los bianconeros ha terminado por condenarle.
En busca de dar un cambio de rumbo llega a Turín un hombre con carácter, ex seleccionador de Italia y que ha pasado por los banquillos de Roma, Inter de Milán y Nápoles entre otros. Todo el mundo recuerda su etapa en el conjunto napolitano, saliendo campeón con un estilo de juego muy vistoso.
El nuevo técnico de la Juventus firma su contrato hasta junio de 2026, con la posibilidad de ampliarlo una temporada más. El objetivo que le habría marcado el club para que eso suceda es que logre clasificar al equipo para la Champions League.
De momento, pese a los malos resultados hasta la fecha están a solo tres puntos de los puestos que le llevarían a la máxima competición europea. El problema es que son muchos los equipos que hay implicados y que se han convertido en competencia directa. Nápoles, Roma, Inter, Milan, Como y Bolonia no frenan y quieren tener su hueco en Europa también. Los seis equipos están por encima de la séptima posición que ocupa la Juve. Por detrás y muy cerca de ellos están equipos como Cremonese, Atalanta y Lazio.
Había muchas dudas sobre la respuesta de la afición a su contratación, pues incluso se le ha visto en alguna ocasión un tatuaje en el brazo del Nápoles, pero la situación es tan desesperada, que creen que puede ser el hombre ideal.
En su palmarés como entrenador consta el ‘Scudetto’ logrado con el Nápoles, dos Copas de Italia y una Supercopa de Italia, todas ellas con la Roma. Además de dos títulos en Rusia: una Copa y una Supercopa con el Zenit.
Debutará este sábado a domicilio ante el sorprendente Cremonese y luego entre semana en Champions, donde todavía no han ganado, contra el Sporting de Portugal.
TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO