Al igual que muchos futbolistas, Joao Félix tenía marcado en el calendario las fechas de la Eurocopa que se iba a celebrar en Alemania. Tras una campaña en la que no había logrado consagrarse en el Barcelona, todo hacía indicar que Portugal podía ser la tabla de salvación para volver a revalorizar su valor como futbolista. Pero ha sucedido todo lo contrario.

El delantero que pertenece al Atlético de Madrid ha jugado dos partidos en la Eurocopa. El primero fue ante Georgia, un encuentro intrascendente para Portugal que ya tenía asegurado el primer puesto y que perdieron por un sorprendente 2-0. Y el segundo fue ante Francia en los cuartos de final. Bob Martínez le dio los últimos 15 minutos de la prórroga para sorpresa de muchos. Unos minutos en los que tuvo una gran ocasión de gol de cabeza para darle el paso a las semifinales a los lusos.

Pero no lo logró y llegó la tanda de penaltis. En esta ocasión Diogo Costa no pudo ser salvador como sucedió contra Eslovenia en los octavos de final. No detuvo ni un solo penalti. Y Portugal por su parte falló uno. El único que falló fue el que tiró Joao Félix al palo. Algo que ha provocado las iras de los aficionados portugueses.

Prueba de ello, fue que le arrancaron la cabeza a una de las imágenes a tamaño real de Joao en las afueras del estadio dónde se celebraron los cuartos de final. Después del partido, los aficionados se hacían fotos con el cuerpo del jugador del Atlético de Madrid.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO