En solo seis semanas, el FC Barcelona ha pasado de estar sufriendo por asegurarse la cuarta plaza en LaLiga, a ser segundo y seguir en la pelea por el título y a tener asegurada su participación en los cuartos de final de la Champions League. La metamorfosis del equipo se explica por los siguientes motivos:
El efecto Xavi
Desde que el técnico de Terrassa anunció su marcha a final de curso tras la derrota ante el Villarreal el pasado 27 de enero, el Barça ha encadenado siete victorias y tres empates, que le han llevado de ser cuarto a segundo en LaLiga y tener asegurado el pase a los cuartos de la Champions League, donde se medirá al Paris Saint-Germain.
La revolución de los jóvenes
Forzado por las bajas y las limitaciones económicas del club, Xavi se ha visto obligado a apostar por los jóvenes y la cantera está respondiendo al reto. Pau Cubarsí, con solo 17 años, se ha convertido en indiscutible en el eje de la defensa del Barça, hasta el punto de que ha sido convocado con la selección. Igual que Lamine Yamal, un fijo ya para De la Fuente en la Roja con solo 16 años, tras sus exhibiciones con el Barça. Pero a ellos se le suman Fermín, que ya suma seis goles esta temporada y es el centrocampista con más gol del Barça. O Héctor Fort, que cuando Xavi lo ha necesitado ha respondido con nota en escenarios imponentes como San Mamés o el Metropolitano.
Solidez defensiva
El Barça estuvo más de dos meses sin la participación de Marc ter Stegen, su portero titular. La ausencia del alemán, unido al mal momento del equipo, hizo que el equipo se mostrara muy vulnerable en defensa. Desde la reaparición de Ter Stegen ante el Granada, el equipo solo seis goles en los últimos ocho partidos. Además, en los últimos cuatro de Liga ha encadenado cuatro porterías a cero.
Lewandowski vuelve a ser determinante
Robert Lewandowski se ha convertido en una pieza fundamental en el resurgir del equipo. El delantero polaco, que ante el Atlético firmó una de sus mejores actuaciones como azulgrana con un gol y dos asistencias, acumula siete goles desde que Xavi anunció su marcha el pasado 27 de enero, dos ante el Nápoles, claves para el pase a cuartos. Además, ya es el jugador que ha participado en más goles en LaLiga: 20 (13 goles y 7 asistencias), por delante de Bellingham, 19 (16 goles y 3 asistencias) y Dovbyk, 19 (14 goles y 5 asistencias).
Los veteranos recuperan su mejor versión
Además de Lewandowski o Ter Stegen, futbolistas como Gündogan -que ha mostrado los galones asistiendo y liderando el centro del campo- u otros no tan veteranos pero importantes en la plantilla como Koundé o Araujo han recuperado su mejor versión. El francés y el uruguayo, por ejemplo, salieron retratados en la final de la Supercopa de España en Arabia ante el Madrid, pero desde entonces han ido en una progresión en ascenso. Koundé ya no se queja de jugar en el lateral derecho y es una garantía tanto en defensa como en ataque y Araujo es un baluarte en el eje, acompañando al revulsivo Cubarsí.
El equipo, una piña
A pesar de sufrir lesiones de jugadores importantes como De Jong o Pedri en las últimas semanas, el equipo ha dado un paso adelante. Cuando todo el mundo pensaba que el Barça se vendría abajo en la fase decisiva y ante rivales de peso, la plantilla ha respondido de la mejor manera demostrando que el grupo está por encima de las individualidades. El espíritu solidario y el sacrificio para llegar donde el compañero no puede llegar es ahora un valor en el Barça, donde todos reman en la misma dirección.
Mejor preparados físicamente
Tras el triunfo ante el Atlético, Robert Lewandowski desveló que una de las claves del buen momento del equipo fue que «en las últimas semanas hemos cambiado el entrenamiento, ahora ponemos más intensidad». La eliminación de la Copa del Rey ha permitido que Xavi y su staff programen entrenamientos con más carga de trabajo al disponer de semanas largas y los resultados se están viendo con la mejor versión del equipo de la temporada, justo en el momento en el que se está disputando los dos títulos más importantes.
TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO
