Un tiroteo en la puerta del estadio Maracaná en un intento de robo la noche de ayer despertó las alarmas nuevamente en Río de Janeiro, a horas de la final de la Copa Libertadores entre Boca y Fluminense. El hecho ocurrió justo por el sector en el que ingresa la prensa y si bien había personas presentes, no se reportó ningún herido y el robo fue frustrado por un policía.

Todo sucedió cuando un delincuente que se trasladaba en moto intentó robar un vehículo de un hombre que iba acompañado por un amigo que es oficial, que respondió con entre diez y 15 disparos contra el auto, según reportó el periodista local Rodrigo Mattos, quien estaba presente en la escena.

Ante la respuesta del oficial, el asaltante abandonó el auto y escapó. Por el momento no se registró ningún herido y la policía ya se encontraba en el lugar realizando las pericias. Si bien se trató de un hecho aislado a los acontecimientos de los últimos días relacionados al partido, vuelve a poner en el foco la seguridad en las cercanías del estadio.