Pep Guardiola estaba por un lado satisfecho por el holgado triunfo del Manchester City sobre el Everton (0-3), que le acerca un poco más al título en la Premier tras el 'pinchazo' del Arsenal. Por otro, el técnico catalán acabó crispado con Yerry Mina por su actitud durante todo el partido con Erling Haaland.
Haaland anotó su gol número 36 de la temporada, a pesar de que el central colombiano lo intentó parar de todas las formas posibles durante todo el partido. Cuando Haaland se quitó la camiseta después del partido, mostró algunas secuelas del juego sucio al que Mina había expuesto al delantero. Y Guardiola no se calló.
"Lo que hace con los jugadores en el campo no es necesario. Él sabe exactamente lo que ha hecho. Es un buen jugador, pero defender de esa forma no es necesario", ha dicho Pep Guardiola según los diarios ingleses. "Le dije eso. No es necesario lo que hace en cada partido". En la imagen inferior, Haaland posa con las botas con las que anotó otro gol. Se ven algunas heridas en su torso y piernas.
TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO