No fue el mejor partido de Darío Benedetto en Boca Juniors. El goleador no pudo concretar las oportunidades claras que tuvo y por eso su equipo no pudo marcar en La Bombonera en el duelo ante Corinthians por la revancha de los octavos de final de la Copa Libertadores. En los penales, volvió a fallar y fue eliminado.

La primera la tuvo a los 18 minutos de la etapa inicial, luego de un gran contragolpe del Xeneize que Exequiel Zeballos manejó por derecha para dejar en el camino a su marca y lanzar un centro perfecto para el ingreso a toda velocidad del Pipa. Pero, el delantero se arrojó al suelo con la intención de tomar la pelota de aire, antes de que pique, y le dio con el tobillo derecho, motivo por el cual el balón salió varios metros por encima del travesaño.

Pese al lamento, Benedetto tuvo revancha rápidamente y a los 31 minutos se hizo cargo del penal que el árbitro bien sancionó a instancias del VAR para Boca por un codazo de Raúl Gustavo contra Pol Fernández. El 9 desenfundó un disparo muy potente que hizo sonar el palo izquierdo de Cassio, que había elegido el otro lado para arrojarse.

Cómo si esto no fuera suficiente, el 9 tuvo en sus pies la clasificación a octavos. Luego de que Agustín Rossi tapara dos penales en la definición, él tenía que convertir para quedarse con la llave, pero otra vez no pudo. Luego de una larga carrera, pateó con tanta fuerza y agarró la pelota tan abajo que ésta terminó en la segunda bandeja de la tribuna, donde se ubica la barra brava. Sin dudas, una noche que no difícilmente podrá olvidar.