Leo Messi hizo realidad el sueño de un aficionado brasileño. Tanto lo había impresionado el tatuaje que Leo vía Instagram pidió verlo y firmarlo. El 10 cumplió su deseo y coronó el sueño del hincha antes del último entrenamiento de Argentina para el partido contra Paraguay.
Se preparaba Argentina para abandonar el hotel donde se hospeda en Brasilia, rumbo a la última práctica antes del partido con Paraguay. El bus esperaba a los jugadores. Eso sí, hubo uno de ellos que hizo un recorrido diferente a todos. Lionel Messi, apenas cruzó la puerta de salida, no siguió el mismo trayecto que todos. Giró hacia la derecha y ¡fue a buscar a un hincha brasileño para cumplirle un sueño y también para satisfacer un deseo personal…
Es una historia que comenzó en una de las tantas notas de color realizadas con hinchas en la previa del último partido con Paraguay. Ahí apareció Igor, bombero militar que vive en Brasilia, con Messi tatuado en toda su espalda en el momento de aquel festejo de gol histórico contra Real Madrid, mostrándole la camiseta 10 del Barcelona a todo el Santiago Bernabéu y al universo futbolero.
Leo descubrió la historia en una publicación de Instagram de TyC Sports. Tanto se sorprendió que la comentó: “Terrible tatuaje. Me encantó!!! Me gustaría verlo y firmarle”, escribió el 10. Y así fue.
Durante la tarde del domingo brasileño, antes de subirse al bus para ir hacia el ultimo entrenamiento para el partido de mañana contra Paraguay, Messi se arrimó a las vallas de seguridad. Del otro lado, estaba Igor, ya con la espalda lista para que el 10 pusiera la firma. Fue bien breve y rápido por cuestiones de seguridad y para evitar riesgos por la pandemia.
Igor tiene a Messi en su espalda de 2019. Viajó hasta Porto Alegre buscando al mejor tatuador. Necesitó tres sesiones diarias de 12 horas cada una. Pagó 10 mil reales, unos 1.700 euros. Ahora también tiene lo que jamás habia imaginado: la firma de Leo. Y prometió lo obvio: “No hay baño hasta tatuarme de nuevo”.
TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO