Partido fundamental para los intereses de ambos conjuntos en la lucha por avanzar a la siguiente edición de la Liga de Campeones por la vía de la Serie A. El AC Milan, que está acusando en demasía el desgaste físico de una exigente campaña, confiaba en recuperar la segunda plaza del entorchado que su eterno rival (el Inter de Milán) lidera con solvencia. En el caso concreto de la Lazio, no quería descolgarse de dicha batalla tras la victoria del Nápoles ante el Torino.

La contienda arrancaría de manera sensacional para los intereses del conjunto de la capital del país transalpino. Todo ello porque Joaquín Correa, viejo conocido del Sevilla, se beneficiaría de un pase de otro ex de los hispalenses como Ciro Immobile para aventajar a los locales (1 – 0). Poco después, El Tucu se quedaría a las puertas de volver a perforar el fondo de las mallas de la meta custodiada por Gianluigi Donnarumma (un hombre que aún no ha renovado su contrato en San Siro).

La sentencia de Immobile

El sempiterno Pepe Reina le ganaría la partida a Hakan Çalhanoglu, al tiempo que el trencilla invalidaría una diana de Manuel Lazzari por posición antirreglamentaria. Aun así, al regresar del túnel de vestuarios, Correa se zafaría de la presión de Fikayo Tomori, en calidad de cedido por el Chelsea, y convertiría el doblete en su registro particular al batir a Donnarumma (2 – 0). De hecho, el arquero de los rossoneri estaría imperial para echar el cerrojo a sus dominios poco después.

La réplica para el siete veces ganador de la Liga de Campeones trataría de firmarla un Tomori que se ha ganado con creces la confianza de Stefano Pioli en el AC Milan. Immobile, un delantero que se alzó con la Bota de Oro a lo largo del curso anterior, se vería frenado por la madera. Sin embargo, cuando el duelo casi agonizaba, el de Torre Annunziata dejaría la historia vista para sentencia con el definitivo 3 – 0. De esta forma, la Lazio se impondría con claridad al AC Milan en el Olímpico.

TOMADO DE FICHAJES.COM