En su visita al Etihad Stadium, el Leicester City cayó 2-1 y cortó una racha de dos partidos sin perder. Pero ex campeón de la Premier League, al que el Chelsea ya le arrebató el título, estuvo muy cerca de empatar el encuentro. Hubiera logrado la igualdad de no ser por el insólito blooper de Riyad Mahrez.

El mediocampista argelino tuvo la posibilidad de anotar el 2-2 al ejecutar un penal, pero la desperdició: se resbaló y tocó la pelota dos veces, es decir, la impactó con el pie izquierdo e inmediatamente el balón reboto en su pie derecho. La pelota ingresó en la portería del argentino Willy Caballero, pero el tanto no fue convalidado.

El árbitro Robert Madley estuvo muy atento al remate defectuoso del futbolista argelino, quien fuera elegido mejor jugador del fútbol inglés la temporada pasada, y anuló inmediatamente el gol.

La protesta de los jugadores del Leicester fue en vano. El colegiado decretó un tiro libre indirecto para el Manchester City, que finalmente se llevó el triunfo por 2-1 con goles del español David Silva y el brasileño Gabriel Jesús.