Cristiano Ronaldo aseguró eufórico tras la final que “la camiseta blanca me queda de puta madre”. Fue el preludio a su continuidad, a eliminar el más mínimo temor a su posible marcha del Real Madrid. Muy al contrario, jugador y club ya empiezan a plantearse su retirada como madridista. Su gol decisivo en la Champions, tras un partido en el que no hizo absolutamente nada, aunque ahora todos lo encumbran, ha hecho olvidar esos momentos en los que se sentía “triste” y los permanentes temores que se han ido sucediendo, temporada tras temporada de que su final en el club estaba cercano.

Florentino Pérez no pierde el tiempo y quiere aprovechar estos momentos de euforia del luso para perpetuarlo como el jugador insignia del Real Madrid. El portal ‘El Confidencial’ desvela una reunión este martes entre Jorge Mendes, representante de Cristiano Ronaldo, y de José Ángel Sánchez, director general del Real Madrid y hombre de plena confianza de Florentino Pérez. En ella el club ofreció la renovación del contrato del jugador luso por tres años más, a partir del momento que concluya su contrato en 2017. La oferta económica astronómica, cómo no. El Confidencial asegura que es de más de 20 millones de euros netos por temporada, es decir, por encima de los 60 millones de euros por los tres años que se le ofrecen.

Si finalmente Cristiano Ronaldo acepta la oferta, será jugador del Real Madrid hasta junio de 2020, con 35 años ya cumplidos y con la posibilidad de no alargar más su carrera y retirarse como jugador del Real Madrid, que es el sueño que tiene Florentino Pérez. La continuidad asegurada de Cristiano Ronaldo está más cerca que nunca.