Arjen Robben, atacante de la selección holandesa, admitió este jueves que la parada de Iker Casillas, en la Final del Mundial de Sudáfrica 2010, quedará “en toda” su carrera, pero remarcó que “ya es pasado, es historia” y avisó de que no afronta el encuentro de este viernes con ganas de revancha por eso.
“(Aquella parada) es parte del deporte. Ese fue un momento y quedará toda mi carrera deportiva. Pero está en el pasado. Ya es historia. Ahora nos estamos centrando en algo totalmente diferente, el partido de mañana (viernes). Eso que pasó ya no cuenta”, explicó en conferencia de prensa tras el entrenamiento en el Arena Fonte Nova.
Además, el delantero agregó “ya pasó. Fue un momento muy especial la Final de 2010 y ahora nuestro primer partido del siguiente Mundial es con el mismo rival. Es un partido muy especial, pero lo hemos preparado como los otros dos que tenemos que disputar en el grupo. Claro que es especial, pero nos centramos en mañana (viernes). Lo demás es pasado”.
Al cuestionarle sobre si el partido de este viernes lo ve como una venganza, el holandés aseguró que no hay comparación con el partido que se jugó en Sudáfrica.
“Yo no creo en la venganza. En 2010 fue una Final. Ahora es un partido de la primera fase. No hay comparación posible”, aseguró.
Finalmente, Robben aseguró que Holanda se ha preparado muy bien, por lo que no es necesario explicar cuál será la estrategia que utilizarán ante la ‘Furia Roja’.
“Nos hemos preparado muy, muy bien. No creo que sea sensato explicar todos los pormenores de cómo vamos a ganar España”, afirmó.