Uno de los estadios más pequeños tanto en cancha como e capacidad, el estadio municipal de Ipurúa, recibió al equipo galáctico de Real Madrid.

El cuadro de Ancelotti tuvo el dominio de las acciones desde los primeros minutos, el Eibar quiso atacar y tuvo ayunas chances pero todo se desmoronó al minuto 23 cuando en un centro de Cristiano encontró a James solo quien cabeceó y macó el 0 a 1.

 

De ahí en adelante, las cosas se pondrían mucho más suaves para el Madrid que amplió la ventaja 20 minutos después, a los 43 a través de CR7.

 

Benzemá pondría la goleada al minuto 69 y cerró la faena CR7 con un penal algo dudoso pero que definió de excelente manera