Es tanto la popularidad que goza la selección brasileña, y sobre todo, su referente Neymar, que provocó que un niño saltara la valla de seguridad que protegía el entrenamiento de la verde-amarela para ir a buscar a su ídolo.

La seguridad se dio cuenta rápidamente y trataron de sacar al niño, pero el astro brasileño pidió que se lo den y se tomó fotos con todo el grupo y jugaron con él.