La FIFA aseguró que descarta mover de Rusia el Mundial de 2018 pese al conflicto armado en el este de Ucrania y pidió a los países que no boicoteen el torneo.

«La historia demostró hasta el momento que boicotear eventos deportivos o establecer políticas de aislamiento o confrontación no es lo más efectivo para solucionar los problemas», dijo la FIFA en un comunicado.

El conflicto con Ucrania y la supuesta implicación de Rusia en el derribo de un avión de pasajeros en el este ucraniano provocó un debate sobre un posible boicot, con varios políticos alemanes sugiriendo a su país como nueva sede para la Copa del Mundo 2018.

«La FIFA está convencida de que a través del fútbol podemos cambiar de forma positiva el mundo, pero el fútbol no puede verse como una solución para todo, particularmente con esos temas relacionados con la política mundial», señaló la FIFA.