Pelé ha negado que sufra depresión y que esté recluido en su casa sin hacer nada, desmintiendo así la versión de su hijo Edinho, que señaló en O Globo que su padre sufría “cierta depresión” tras un trasplante de cadera al que fue sometido que le impedía moverse con normalidad.

“Estoy bien” -dijo Pelé, quien cumplirá 80 años en octubre-. “Sigo aceptando mis limitaciones físicas de la mejor manera posible, pero tengo la intención de mantener la pelota rodando”.“Tengo días buenos y días malos, eso es normal para personas de mi edad. No tengo miedo, estoy decidido, confío en lo que hago”.

Pelé, considerado uno de los mejores futbolistas de la historia entre otras cosas por ser el único jugador que ha ganado tres mundiales, ha sufrido problemas de cadera durante años y no puede caminar sin ayuda. De hecho, muchas de sus apariciones públicas más recientes han sido en una silla de ruedas.

‘O Rei’ tiene una agenda muy apretada

Sin embargo, amigos del ex jugador de Santos y del Cosmos de Nueva York dijeron que este enero fue uno de los más ocupados en años. Hizo sesiones de fotos y trabajo de patrocinio y está cooperando con un director británico que hace un documental sobre su vida futbolística.

“No estoy evitando cumplir los compromisos en mi agenda siempre ocupada”, dice Pelé en su declaración. Este verano se celebrará el 50 aniversario de su tercer título de la Copa del Mundo, ganado en México en 1970 con el que muchos califican como el mejor equipo de fútbol de todos los tiempos.