Francia terminó por imponer la lógica ante Moldavia y certificó su clasificación para la Eurocopa del próximo verano. Con muchas más dificultades de las que nadie podía imaginar, los actuales campeones del mundo vencieron al cuadro moldavo para asegurar su presencia en el Europeo, donde intentarán hacerse con su tercer título.

El encuentro empezó con una sorpresa mayúscula. Moldavia, que apenas había cruzado la divisoria, se adelantó al aprovechar un error clamoroso de Lenglet, quien no supo cómo despejar un balón llovido y vio como Rata le terminaba robando la cartera para superar a Mandanda.

Francia intentó reaccionar de inmediato, pero los remates de Pavard Giroud no encontraron la portería rival. Mbappé, cabalgando por la banda derecha, era el mejor recurso para unos ‘bleus’ atascados frente a la tupida defensa de Moldavia.

De nuevo Giroud probó fortuna con un cabezazo que salió rozando el palo, mientras que Mbappé lo intentó con un disparo raso que no planteó problemas para el portero moldavo Koselev.

Empate polémico

Pasada la media hora de juego, llegó el empate galo, obra de Varane. El central del Real Madrid cabeceó a puerta vacía después de que a Koselev se le escapara el balón. Giroud interfirió el salto del guardameta moldavo en lo que pareció una clara falta, sin embargo el árbitro terminó validando el tanto pese a las protestas del equipo balcánico.

La segunda mitad empezó con una clara ocasión de Mbappé, que disparó alto. Fue todo una declaración de intenciones de Francia, pero también un fiel reflejo de la falta de puntería gala en el partido.

Los ‘bleus’ llegaron varias veces a la meta contraria, sin embargo lo hacían sin acierto. Cuando los nervios afloraban, los de Deschamps se encontraron con la solución.

Digne combinó con Mbappé, se internó en el área y fue derribado por un defensa. Penalti. Giroud, máximo goleador de esta Francia, no falló y desencalló el billete para la Eurocopa para los actuales campeones del mundo.