Barcelona no jugó un buen partido en Praga de donde se llevó tres puntos importantes en su lucha por encarrilar cuanto antes su clasificación para los octavos de final de la Champions League (venció a Slavia por 2-1 ).

Pese a que el encuentro se puso de cara en los primeros minutos con el gol de Lionel Messi, lo cierto es que el tridente de ataque del cuadro blaugrana sigue sin coger forma. Lo de Ipurua, donde los tres miembros de la MSG vieron puerta, pareció un puro espejismo en Praga. Los datos así lo atestiguan.

Messi y Suárez apenas le cedieron un balón cada uno a Griezmann mientras que el ex de Atlético de Madrid sí los buscó un poco más surtiéndolos con cuatro y dos pases respectivamente.

346 minutos han compartido escenario habiendo jugado juntos seis partidos y anotado seis goles, además de tres asistencias entre ambos.

Griezmann ha marcado cuatro en once encuentros y ha repartido tres asistencias, mientras que Suárez acumula siete dianas en diez partidos. Messi, por su parte, ha firmado tres goles y ha dado tres pases en siete.

Sigue quedando en evidencia que por el momento no terminan de encontrarse sobre el campo, algo que demuestra que les falta tiempo en cancha, como ellos mismos dice, y que su letal producción de temporadas anteriores apenas es un recuerdo.