Wayne Rooney vivió ayer, sábado, un día agridulce. Por un lado el delantero inglés marcó su primer gol en la MLS para ayudar al DC United a vencer a Colorado Rapids (2-1). Por otro lado, acabó el partido con la nariz rota. Rooney abrió el marcador con un gol en el minuto 33 tras recibir de Luciano Acosta y batir entre las piernas al portero Tim Howard, excompañero suyo entre 2004 y 2007 en el Manchester United.

Posteriormente tuvo que ser atendido al sangrar por un codazo en una acción defensiva que le provocó la rotura de la nariz. Tras ser atendido y recibir cinco puntos de sutura pudo continuar con un vendaje.