El Arsenal de Unai Emery, mucho más rodado que su rival y con casi todos sus efectivos a punto, venció con solvencia al PSG en la International Champions Cup (5-1). El equipo parisino dispuso una alineación plagada de jóvenes y canteranos donde los únicos nombres destacados eran los de Rabiot y Buffon.

Mesut Özil, hoy capitán, fue el encargado de abrir el marcador en el minuto 12 después de aprovechar una gran asistencia de Aubameyang. Los hombres de Emery dominaron sin pisar el acelerador en una primera que apenas tuvo historia debido a la diferencia de nivel entre un equipo y otro.

Sin embargo el equipo entrenado por Tuchel salió con otro brío en la reanudación y sorprendió al Arsenal. Weah, arrancó con potencia en el lateral del área para superar a Kolasinac, que cometió penalti intentando rebañar el balón. Nkunku, desde los 11 metros, resolvió con solvencia engañando al portero (59’)

El carrusel de cambios tradicional en estos partidos sentó muy mal a un PSG cada vez más superado con el paso de los minutos. En apena 4 minutos, un doblete (67’ y 71’) del recién entrado Lacazette dejó contra las cuerdas al equipo francés, penalizado también por un error de Buffon en una salida que precipitó el tercer tanto Gunner.

Holding con un extraordinario remate de cabeza a la salida de un córner (87’) y Eddie Nketiah (94’) firmaron la goleada ante un PSG que espera como agua de mayo el regreso de sus estrellas.