En el partido entre Botafogo y Vasco da Gama –en donde fue titular Frickson Erazo y jugó todo el partido– se dio una jugada lamentable para el jugador del Botafogo, João Paulo ya que terminó con la pierna fracturada.

Él y Rildo -jugador de Vasco- fueron a disputar un balón que quedo picando en la media cancha y para mala fortuna del capitán del equipo local el compañero de Erazo le partió la pierna.

Uno pensaría que al realizar una acción así el jugador de Vasco da Gama saldría expulsado pero el árbitro no lo pensó así y solo amonestó a Rildo.