Los incidentes registrados este jueves en Bilbao, con los enfrentamientos entre radicales del Athletic y del Spartak que culminaron con el fallecimiento de un miembro de la policía autonómica vasca, ha provocado la apertura de un expediente urgente de la UEFA, que quiere determinar exactamente lo que sucedió en las horas previas al partidoantes de adoptar cualquier decisión.

El máximo organismo continental ha pedido información al delegado de la UEFA, al responsable del estadio, así como a sus propios representantes de prensa y a los dos clubs implicados. Dicha información, una vez recabada, será estudiada por el Comité de Control, Disciplina y Ética, que será el responsable de sancionar los hechos.

Proibición de viajar

Si este órgano los considerara muy graves, los derivaría de manera automática al Comité Ejecutivo de la UEFA, que tendría la última palabra a la hora de dictar sentencia. Los precedentes acumulados por los radicales del Spartak invitan a pensar en una dura sanción al cuadro moscovita, que podría ir desde una fuerte multa económica a su expulsión de las competiciones continentales, pasando por el cierre de su estadio.

Lo que es casi seguro, según aseguran fuentes de la UEFA consultadas por Mundo Deportivo, es que el Spartak será sancionado con la prohibición a sus seguidores de viajar con el equipo en futuros desplazamientos europeos.

El Athletic, sin los precedentes del Spartak, también corre riesgo de ser sancionado, aunque en su caso, salvo sorpresa, difícilmente iría más allá de una multa de índole económica.

Fuera de San Mamés

El hecho de que los incidentes se produjeran fuera del recinto deportivo estricamente dicho no evita que la UEFA no pueda sancionarlos. Un cambio legislativo, acordado con las autoridades comunitarios, habilita a este organismo a poder actuar en este tipo de situaciones.

En este caso, además, el escenario de los enfrentamientos fue la explanada contigua a San Mamés; si hubieran tenido en el centro de la ciudad, las opciones de la UEFA para intervenir habrían sido mucho menores.

El Comité de Control debería reunirse antes de la próxima ronda de torneos continentales, dentro de quince días. Pero este domingo, y aunque sea de forma informal, el tema puede empezar a ser estudiado por los miembros de la UEFA que participarán el lunes en el Congreso que el organismo celebra en Bratislava.