La historia de Alexis Sánchez está próxima a su fin. El chileno viajará a Manchester y Mkhitaryan realizará el camino opuesto a Londres. Un trueque entre el Arsenal y el United en el que no habrá compensaciones económicas: “Esa será la operación”, confirmó Wenger hace unos minutos, contundente en su exposición: “Alexis se irá si viene alguien en su lugar”. Es la petición del alsaciano, que ha dado el visto bueno a la llegada del armenio: “Si viene es porque me gusta. Nos hemos enfrentado a él en varias ocasiones y aprecia nuestra forma de jugar a fútbol”, elogió el técnico del Arsenal, que explicó que “el sueldo no será un problema”.

Como explicó Mundo Deportivo, la operación bilateral se cerrará entre hoy y mañana, aunque a Wenger le hubiera gustado vender a Alexis Sánchez en verano: “No fue posible entonces porque todo se hizo demasiado tarde”. Ahora, a seis meses para que expire el contrato del chileno, el Arsenal ha encontrado la mejor solución. Pierde a una estrella pero recibe a cambio a un futbolista que no ha explotado todas sus virtudes en Old Trafford. Wenger, sin embargo, no dio por cerrada la cuestión: “Tengo experiencia, conozco el mercado y a pesar de que las cosas estén avanzadas nunca nada se puede dar por hecho”, aunque todo apunta que el intercambio llegará a buen puerto.

Wenger no tuvo palabras de reproche hacia Alexis, que desde hace meses evidenció su voluntad por salir del Arsenal. Tanto que hasta se rumoreó que el vestuario le quería fuera del club: “Siempre ha estado comprometido y preparado. No puedo cuestionar su actitud”, destacó el preparador del cuadro londinense, que entiende la decisión de su todavía pupilo: “Tiene 29 años y el próximo contrato será decisivo para su carrera”. Y no es para menos, porque el United le puso sobre la mesa una oferta difícil de rechazar: 15,8 millones de euros anuales -el mejor pagado de la Premier junto a Pogba– y cuatro años de contrato: “Respeto al United porque generan el dinero para pagar a todos sus jugadores. Están muy bien organizados a nivel financiero”, subrayó Wenger, que lanzó un dardo contra el fútbol moderno: “Hay un grupo reducido de grandes equipos que hacen que este deporte sea mucho más predecible que antes. El dinero ha marcado una diferencia tremenda”.

Una queja sujeta a la idea de no haber podido retener a Alexis, un futbolista cuyas aspiraciones siempre fueron mayores que las que tuvo el Arsenal. Ahora los de la capital inglesa deben reforzarse, aunque Wenger afirmó que “nada está tan cerca como este trueque”. Favoritos en la Europa League, el objetivo pasa también por regresar a la Champions, empresa complicada en estos momentos: “No pienso en mi futuro. Eso pasa a un segundo plano ahora”, finalizó Wenger, que a pesar de no poder competir en lo económico frente a equipos como el United o el City considera que lo puede hacer en el césped. Ahora, no obstante, deberá hacerlo sin Alexis Sánchez.